A menos que vivas debajo de una piedra, lo más seguro es que durante los últimos días no has escuchado hablar de otra cosa más que BREXIT. Pero, ¿qué es y con qué se come?.
Para empezar, no, no es una comida. «Brexit» es el término que se le dio al movimiento a favor de que Gran Bretaña («Bre») saliera («exit») de la Unión Europea (UE)… como llevaba años amenazando. El video a continuación, uno de mis favoritos, es una explicación ilustrada de dicho comportamiento… además de presentar varios prejuicios existentes entre los mismos europeos.
Tras esta momento cómico, mágico, musical, les cuento que el referéndum (una herramienta de la democracia para escuchar la voz del pueblo) se realizó el pasado 24 de junio y, contra todo pronóstico, Brexit y no Bremain (quienes estaban a favor de seguir siendo parte de la UE) resultó triunfante.
Los resultados de dicha votación han impactado a nivel mundial y a una velocidad increíble (¡gracias globalización!) y aunque Gran Bretaña tiene aún 2 años para retirarse oficialmente de la Unión (este es solo el aviso de notificación), las consecuencias han alcanzado y alcanzarán diversas áreas de nuestra vida cotidiana… como el viajar.
Aún es muy incierto el futuro después de Brexit, hay británicos que incluso están pidiendo un segundo referéndum para anular el resultado del primero pues están arrepentidos de su decisión tras ver las consecuencias que ésta ha traído (eso les pasa por no Googlear «¿Qué es la Unión Europea?» antes de la votación). Sin embargo, estos son algunos de los posibles escenarios para los viajeros:
- La libra se fortalece (aunque en este momento ha caído estrepitosamente), haciendo aún más caro el visitar dicho país.
- La libra pierde valor, haciendo más fácil su adquisición, pero complicando la economía de naciones en desarrollo, como México.
- Especialmente para las aerolíneas británicas de bajo costo como EasyJet (mi favorita) o Monarch, se modificarían los acuerdos que actualmente rigen y permiten la competencia entre las diferentes aerolíneas de la Unión, encareciendo los viajes y cambiando las rutas aéreas.
- En cuanto al ingreso al Reino Unido, que ya de por sí es algo complicado pues no pertenecen al Acuerdo de Schengen (que suprime las fronteras entre los países de la UE), se podrían intensificar los controles de acceso a su territorio y requerir el trámite de visa.
Mientras tanto para el sector turismo de Gran Bretaña, Brexit tampoco es buenas noticias: al existir la posibilidad de una reducción en el número de turistas internacionales también existe la probabilidad de perder al menos 63,000 trabajos en dicha industria.
Pero tranquilos, no todo está perdido, después de estos días de incertidumbre los gobiernos deberán comenzar a trabajar en la negociación de nuevos acuerdos que probablemente reducirán el impacto económico de la salida de Gran Bretaña de la Unión y con fortuna dichos cambios se implementarán gradualmente, permitiéndonos disfrutar un par de años más los beneficios de un bello y (ahora parece) utópico ideal llamado la Unión Europea.
¿Qué opinas de Brexit? ¿Aún quieres viajar al Reino Unido?
Fuentes: